Como ya hemos investigado en el pasado, los filtros son una parte importante en el equipo de los lectores de este blog. Principalmente como protección pero también tienen sus grandes usuarios por los beneficios que traen su utilización Pero hay veces que tal vez por hacer demasiada fuerza o simplemente por el tiempo que estuvieron junto a la lente se atascan y no hay forma de sacarlos.

Soluciones hemos reseñado unas cuantas, que van desde utilizar cintas de tela hasta precintos unidos basándose en el hecho de que, con algo de fuerza, todo filtro tiene que ceder. Aun así, hay algunos casos que no hay chance y el filtro no se va a mover. ¿Que hacer en estos casos? Craig Pulsifer se encontró en una situación similar y tras consultar al equipo técnico de Canon, la solución dada involucraba una sierra y un martillo. Las siguientes imágenes ilustran el proceso y cuidado que puede provocar alguno que otro infarto ante los ojos sensibles.

Utilizar una cierra para cortar el filtro al medio.

Con un martillo romper el cristal.

Remover los cristales con una pinza.

Torcer los bordes del filtro hacia adentro.

Remover el ex-filtro.

Colocar el filtro nuevo y levantar los pulgares en señal de aprobación.

Pheew! ¿Estresante, verdad?

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