Instagram se ha convertido un fenómeno con más de 50 millones de usuarios. Estos números más el cambio de manos de hace unas semanas por parte de Facebook demostraron que ya no se trataba de un fenómeno curioso con cuatro gatos como usuarios y dirigido únicamente a hipsters (me rehúso a crees que existen 50 millones de hipsters en el mundo).

¿Cual es la razón del éxito de Instagram? ¿Cómo afecta esto al mundo de la fotografía? y ¿por qué todo esto son buenas noticias?

Esta son unas preguntas difíciles de hacer y mucha gente se rehúsa a contestarlas. Hay fotógrafos profesionales que se burlan de los usuarios de Instagram con un dejo de desprecio y casi ningún fotógrafo que publica en Instagram es tomado en serio por sus colegas.

Primero quiero intentar responder el porque del éxito de Instagram. Originalmente este se trataba de un proyecto que traía al mundo digital el aroma de viejo de las cámaras analógicas. Mientras la fotografía digital se perdía en una carrera de sensores, full format y lentes de gran claridad que buscaban la fotografía perfecta, aquí aparecía este programa que utilizaba la mediocre cámara de iPhone (mediocre comparada con las cámaras DSLR profesionales) aplicándole las imperfecciones de cámaras con lentes de plástico, aberraciones cromáticas y filtraciones de luz.

Muchos críticos de Instagram indicaban que sus usuarios buscaban emular esas viejas cámaras, hablaban de la melancolía que generaba estas fotografías así como la terquedad de muchos de estar aferrados al pasado. Personalmente no creo que nada de eso sea verdad, principalmente porque la mayor cantidad de los usuarios de este programa no saben la historia detrás de los filtros de Instagram, no han visto una Holga en su vida o han escuchado el nombre Hasselblad. A pesar de esto, de la ignorancia respecto a la fotografía analógica, el resultado es que para los usuarios, las fotografías que han pasado a través de sus filtros les resultan atractivas. Más atractivas que las mismas fotografías conseguidas con una mejor cámara. Sin más misterio que ese, a los usuarios les gustan sus propias fotos.

¿Cual es la razón para que esas fotos con colores falsos, sombras en las equinas o manchas de luz resultan atractivas?. En general en los gustos no hay mucha lógica, pero quizás es una respuesta a la cantidad de imágenes perfectas con las que nos encontramos todo los días. Imágenes que utilizan las últimas tecnologías en fotografía y manipulación Photoshop para mostrarnos un mundo inmaculado. En la imperfección de las imágenes que salen de Instagram, incluso cuando se tratan de escenas intrascendentes, es posible encontrar algo diferente, algo original. Una visión del mundo que resulta novedosa. Así sus usuarios encuentran la belleza en el mundo imperfecto que les rodea.

La imperfección por un lado, y por el otro lado el importante aspecto social de este fenómeno dan como resultado una herramienta de gran presencia y mucho futuro.

¿Cómo afecta esto a la fotografía?. Los fotógrafos que ven cómo un adolescente con un teléfono recibe más visitas y halagos que él con su cámara de varios miles de dólares es una de las razones de esta especie de desprecio que Instagram genera en muchos fotógrafos. Quizás la primera pregunta para hacer es que si de verdad podemos hacer la distinción entre un Fotógrafo con mayúscula y un mero usuario de Instagram. Ambos sacan fotografías, ambos se comunican con imágenes, ambos intentan encontrar su visión personal del mundo a través de la tecnología de la fotografía (sea digital o analógica). ¿Entonces dónde reside la diferencia?.

Una vez más le estamos dando más importancia a la herramienta que a los resultados. Si la fotografía nos gusta ¿por qué es necesario saber cual fue la cámara (o programa) que la generó?. ¿No es igual un libro escrito en máquina de escribir que en un en ordenador?.

Y finalmente, ¿Por qué todo esto son buenas noticias?: Porque para ser fotógrafo no necesitas invertir miles de dólares, ni tampoco necesitas un manager y lograr una exhibición y una publicación para poder llegar a tu publico. Porque hay más oportunidades de encontrar buenos fotógrafos y descubrir imágenes interesantes.

Al final Instagram no es importante más que para hacernos comprender que si más personas sacan fotografías, más personas les gusta la fotografía y están interesados en aprender sobre color y composición. Y en el fondo, de manera muy egoísta también es más fácil encontrar a un público que le gusten tus imágenes,porque es mucho es más fácil ejercitar y practicar tu arte y es más fácil encontrar inspiración. Todo eso son buenas noticias.

¿Y que pasa para los fotógrafos profesionales que se sienten invadidos en su burbuja?. Los periodistas ya han sufrido este trauma, así como los escritores y los dibujantes de cómic. Ser fotógrafo no consiste hoy en día únicamente en el equipo que tienes, de tus contactos y tu portafolio. Ahora también es importante que seas un buen fotógrafo.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: