Venimos siguiendo de cerca los pormenores del estado de Kodak. De acuerdo con la empresa estadounidense, todo esta relativamente bien después de pedir la quiebra la semana pasada, dado que, de acuerdo con una entrevista realizada horas después de la bancarrota, los de Kodak todavía afirman que las películas siguen siendo un negocio rentable.
“Las películas siguen siendo un negocio rentable para Kodak, y tenemos el portfolio más amplio y respetado de películas tanto en fotografía como en cine”, afirmó Audrey Jonckheer, el director de marketing y relaciones públicas de la empresa. Y agregó: “hemos tomado los pasos necesarios para sostener el negocio mientras decae, y sabemos que hay cientos de fans apasionados por las películas, por cualquier motivo artístico o de calidad que elijan”.
Aunque parece ser que todavía hay una luz de esperanza para Kodak allá afuera, algunos dicen que este argumento de la rentabilidad de los negocios en películas puede demostrarse falsa. Algunos hasta dicen que puede ser un chiste. De acuerdo con Jonathan Eastland, del British Journal of Photography, “Kodak tiene que observar cuál es su negocio principal. ¿Qué les hizo pensar que la impresión digital haría aumentar sus acciones? Kodak tiene que retroceder y hacer números sobre el mercado de las películas. Lo que quiere la gente son esas pequeñas cajas amarillas, y ese debería ser su negocio principal, aunque signifique una reducción grande del tamaño de la compañía”.
El futuro de Kodak todavía pende de un hilo, y mientras muchos medios eligen decir que, con la supuesta partida de una de las empresas pioneras en el sector, muere también la película en la fotografía (dejando lugar a lo digital), otros prefieren ser más cautelosos y no emitir juicios que, por el momento, no pueden sostenerse en ninguna declaración o estadística. Solamente sabemos que Kodak ha prometido cumplir con todos los compromisos que tiene con sus clientes, y la bancarrota no afecta a otras oficinas en el mundo. Quedamos en sintonía para más novedades.