Hace algunas semanas les contamos sobre los problemas que estaba teniendo Nikon en su planta de operaciones en Tailandia, y cómo nos afectaría a nosotros los usuarios. Desde la compañía japonesa han enviado una actualización sobre el estado comercial de la empresa, y aunque podemos ver un avance, el panorama sigue siendo bastante devastador en términos de ventas.
De acuerdo con la actualización de Nikon, se ha terminado de bombear el agua que se encontraba dentro de la fábrica (ubicada dentro del Rojana Industrial Park), a fines de noviembre. Ahora, Nikon tiene que devolver la infraestructura a su estado original y reemplazar los equipos de fabricación. La compañía afirma que está poniendo todas sus energías en lograr que esto pase, y espera tener todos los trabajos terminados en enero del año que viene.
Una buena noticia que cuenta Nikon es que muchos de sus socios en Tailandia han logrado recuperarse de la catástrofe natural, por lo que muchas de sus cámaras digitales y lentes intercambiables fueron enviados a sus clientes a partir del 30 de noviembre.
Como les dijimos anteriormente, la inundación ocasionó que muchas órdenes y pedidos hechos a Nikon se retrasaran considerablemente. Sin embargo, parece que la empresa se recuperó y que podrá ser un competidor fuerte para la temporada de ventas de navidad.
Pero, por supuesto, esto tendrá un impacto considerable en las ventas anuales de la empresa. De acuerdo con las propias estimaciones de Nikon, las ventas fueron impactadas en 65 mil millones de yenes, y se perdió oportunidad de generar una ganancia por 25 mil millones.
Nikon finaliza el comunicado afirmando que se están recuperando rápidamente, más de lo esperado, pero que además piden muchas disculpas tanto a sus asociados como a sus clientes por los inconvenientes asociados. Recordemos que, después de la inundación, la planta de producción de la compañía en el país del Sudeste Asiático quedó totalmente inoperable y bajo el agua.