Todos hemos visto esas espectaculares imágenes de gotas de agua impactando en la superficie del agua con distintos colores, impactando sobre otra gota que sube, creando coronas, etc... Fotos impresionantes que supongo que muchos, al igual que yo, en algún momento os habéis preguntado cómo se hacen. Hoy voy a intentar explicar cómo realizarlas en casa.

Lo primero que tenemos que hacer es encontrar un espacio en casa donde podamos montar el tinglado con todas las herramientas necesarias y que nos dejen trabajar tranquilos durante un par de horas, puesto que es una técnica que requiere algo de paciencia y de práctica sobre todo.

Este tipo de fotografía es macro, es decir, usaremos grandes magnificaciones para poder sacar con detalle la gota de agua y su impacto, para lo cual necesitaremos obligatoriamente una lente macro. Además, necesitaremos una fuente de luz, para lo cual podemos utilizar un flash o mejor aún una fuente de luz continua pero potente, como algún tipo de bombilla led puesta en una lámpara.

Montamos la cámara en el trípode y pondremos enfrente una superficie de agua, que puede ser un plato, un vaso o cualquier tipo de recipiente que contenga agua y sobre el que podamos derramar más agua. Preferiblemente pondremos un fondo detrás del montaje de colores, motivos o lo que os guste más (en este punto ya entra el gusto artístico y estético de cada fotógrafo). A una cierta altura ( 1 metro más o menos ) deberemos colgar un recipiente con agua, como una botella, una bolsa o cualquier cosa a la que podamos practicarle un pequeño agujerito suficientemente pequeño como para que el ritmo de goteo sea lento y pausado y nos dé tiempo a realizar la fotografía (más adelante podremos aumentar la velocidad y hacer chocar a una gota con otra al impactar).

Haciendo uso de un disparador remoto para poder controlar mejor mientras dejamos gotear la fuente de líquido esperaremos a que la gota vaya a impactar sobre el agua para apretar el disparador. No os preocupéis si las primeras veces no conseguís ningún resultado, es normal, como dije al principio del post es una técnica que requiere algo de paciencia y de práctica.

Con esto y algunas prácticas no deberíais tener problema para realizar fotografías tan o más espectaculares que la que abre este post y que siempre nos maravillan a todos. No olvidéis experimentar con aguas de distintos colores, luces, fondos y demás y compartir vuestros resultados con nosotros en los comentarios.

Foto: gagstreet Foto2: Ben Birchall

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